miércoles, 18 de julio de 2012

Winter I



Capitulo I


Ya estaba todo listo y el día para entregar los papeles se acercaba, ciertamente no sabía por que lo estaba haciendo sólo sabía que tenía que hacerlo y dejar de intoxicarme por vivir aquí.


Fue algo difícil permanecer con el promedio que estaba pidiendo para el intercambio pero bien valía la pena sabía que sí llegaba a tener la suerte que tanto había deseado, estaría el próximo mes en Finlandia.
-Srita...- se quedó mirándome fijamente hasta que reaccioné -Tiene todo completo, ¿está segura de tomar Administración en Helsinki?- 
-Ciertamente no por que no es mi carrera, pero haré mí cambio una vez que este allá creo que es más fácil- 
-Sí, en parte tiene razón, pero ahora preocupese por el exámen de admisión espero se haya preparado lo suficiente y tenga suerte.- término poniéndole un clip a mis documentos y dándome una hoja en un folder.
-¡Gracias! Hasta luego- concluí y me retiré.

Estaba tan distraída que no noté sí quiera quién me entendió, parecía extraño pero algo me decía que todo saldría bien. Lo peor era decirle a mi madre que me iría ya que hice papeleo sin siquiera mencionale una palabra. 


-¡Quéeee?... ¿Acaso estas loca?!-  dijo en un tono serio y molesto.
-Podría decirse que sí, pero nada es....- interrumpiéndome prosiguió 
-Sabes perfectamente la situación económica que estamos pasando y te atreves a meterte en un intercambio escolar sin siquiera pedirme opinión, ¡sabes lo que significa eso? No tienes mí consentimiento, no harás ese exámen, ni siquiera haciéndolo te quedarías- con esas palabras mató lo poco que quedaba de amor por ella, así que  terminé dejándola sola con la palabra en la boca y me retiré. Me subí a mí cuarto azotando la puerta lo más fuerte que pude y me eché a llorar en mí cama abrazando a mí oso de peluche. 




Todo estaba listo el avión salía a las 8:00 am, viajaría varias horas así que mí madre se aseguro de ponerme comida para una semana de campamento, era algo extremista pero logró convencerme que me lo llevara a pesar del servicio que brindaba el avión. 
Yo no dejaba de pensar sí no se me olvidaba algo, creo que tenía todo, estaba emocionada y a la vez triste, estaba dejando gran parte de mí aquí, me dolía dejar lo que más amaba en este mundo, mí familia, pero era necesario hacerlo ya no podía permanecer ahí.

Era hora de abordar, mí madre corrió y me abrazo tan fuerte como pudo sin querer soltarme mientras mis hermanos se encontraban emocionados por los aviones, mí padre comenzaba a sentir mí partida y comencé a llorar amargamente recordando la pelea por este intercambio.


------¡¡Abre esa maldita puerta!! ¡Crees que resolverás las cosas dejándome como idiota? Abre de una vez te digo o la tiraré- ¿qué más puede pasar? ¿Que tire la puerta y terminé con mí miserable vida? O peor aún saque el sobre de mí bolso y lo rompa... Corrí a guardar el sobre debajo del colchón por sí le llegase a pasar esa idea loca de querer detenerme.
-No voy a abrir hasta que llegue papá, así que puedes ir guardando las ganas de matarme para más tarde- grité exagerando mí sarcasmo
-Muy bien señorita pues puedes ir cavando tu tumba por que te aseguro no te irás de intercambio.- se fue en lo que me volví a tumbar en mí cama a llorar nuevamente. 


Desperté por que sentí alguien sentado a lado mío viéndome dormir, mis ojos hinchados no me permitieron ver en seguida así que llevándome las manos a los ojos, los talle suavemente hasta que pude abrirlos.... 

-¡Papá! ¿Cuánto llevas aquí?
-Lo suficiente como para poder entender por que quieres irte...- me miró con cierta tristeza y continuó hablando -Hija, sé que estamos pasando por una situación en la cual pudiera parecer que no prestamos ni la más mínima atención a ustedes, trata de entender que tu madre está estresada por que no hay suficiente dinero en casa, pero tampoco quiero que se estén peleando de esa forma ¿Dime es verdad que quieres irte?-
-Papá no quiero dejarlos, los amo mucho pero sé que mí mamá se está volviendo loca con todo esto y no quiero ser una carga.
-Creéme que jamás serás una carga hija...
-Papá los gastos van por cuenta de la escuela y sólo me encargaré de mantenerme con casa, comida y vestimenta...
-Lo sé hija, me informe desde que tú madre me contó lo que harías, pero ¿crees que no me duele dejarte ir sola a un lugar donde no conoces a nadie, donde puedes exponerte a muchos peligros? 
Hija por favor piénsalo bien, yo te apoyaré, no dudo de ti, ni de tú inteligencia, sólo piénsalo ¡sí?
-Papi no tengo nada que pensar ya lo decidí y es lo que quiero, desde hace meses salió el circulante del intercambio y hoy fue el último día en que recibieron papeles, creéme que me costo mucho trabajo decidirlo y poner un pie en ese lugar.... - comencé a sentir lágrimas caer de mis ojos y mí padre se acercó a abrazarme fuertemente. 
-Bien hija... Mucha suerte, prométeme que serás buena niña y estarás comunicándote seguido, no quiero tener que irte a jalar las orejas... - me despeino el cabello y rió un poco haciéndome sonreír a mí. -Siempre serás mí princesita Lane...- me arrodille en mí cama sujetándolo aún más fuerte a mí.
-Te amo papi, te amo mucho!
-Y yo a ti, bien, debo de irme a dormir es algo tarde para mí, descansa pequeña....- se levantó y fue caminando directo a la puerta..
-Amm papi ....
-Yo hablo con ella, tú tranquila.- salió poniéndole seguro a mí puerta nuevamente y cerró.-----



Por favor no se te olvide avisar cuando llegues ¿sí?- dijo mí madre limpiándose las lágrimas que salían de sus ojos- Y por favor compórtate como lo que eres.
-Martha ya basta de tus regaños... Niños vengan a despedirse de su hermana... Hija Te amo y espero verte pronto aquí con nosotros, cuídate y prométeme un mensaje diario, me harás falta ...- en eso me abrazó y sentir llover mis ojos lentamente hasta que dieron la tercera llamada para abordar el avión, besé a mis hermanos, tomé mi equipaje y me dirigí a abordar el avión. 

Volteé por última vez a darles un adiós con la mano y seguí caminando. 


***

Nunca en mi vida había viajado tanto como para sentir ganas de no volver a sentarme en mi vida... Me urge bajar del avión 
-Señores pasajeros estamos a punto de aterrizar, favor de abrocharse sus cinturones de seguridad- dijo una de las aeromosas.

Ya una vez estacionados, comencé a bajar mi equipaje peleándome con las maletas gordas y pesadas que parecían bultos de papas.
-¿Te ayudo?- dijo una voz suave y delicada detrás de mi, yo en seguida dirigí mi mirada hacia tal sujeto que había ofrecido su ayuda.
-Woow- pensé, que lindo hombre, media alrededor de 1.78 cm con unos ojos azules como el mar en verano, nariz pequeña, labios delgados y una silueta muy bien formada...
-Este sii ... Sí me haces favor- no me contuve en mirar la forma de Su cuerpo de espaldas. Lucía unos brazos bien formados aún con esa sudadera puesta y unos glúteos que mmm..
-Listo, sí que están pesadas...- sonrió dejando caer las maletas en el suelo del avión. Mirándolo bien su encanto era aún más hermoso al sonreír. 
-Hola soy Eiki ¿y tú eres?
-Soy Lana pero me dicen Lane puedes llamarme como sea- sonreí ante tal encantador hombre.
- Y bien, noto que no eres de aquí ¿de dónde eres? ¿Y que te trae a las frías tierras de Finlandia?- preguntó sin dejar de mirarme y ayudarme con mi gran equipaje, comenzando poco a descender del avión.
-Bien soy Mexicana y vengo por un intercambio escolar...
-Mmm suena bastante interesante- dijo tocándose la barbilla con sus dedos -y bien ¿qué estudias?- 
-Estaba estudiado contaduría pero aquí estudiaré Administración- respondí alegremente.
-¿Y ese cambio tan radical a que se debe?
-Nada más que al simple hecho del promedio- dije haciendo un gesto de vergüenza  
-Oh no te preocupes me imagino que realizarás un cambio ¿no es así?, harías bien, eso de la administración no es lo mío y me imagino que lo tuyo tampoco- rió 
-Sí Lo haré aunque lo que me urge es saber donde me quedaré está noche. Tengo que buscar un hotel y después iré...- habló rápidamente antes de que pudiera terminar mi frase 
-Ah no te preocupes donde yo vivo es un lugar hecho para extranjeros estudiantes como tú, así que puedo llevarte sin ningún problema, hoy estas de suerte Lane...- sonrió picaramente
-¡Gracias! Eres como un angelito caído del cielo, ¿y tú vives ahí? ¿No eres de aquí?- pregunté intentado saber un poco más de él.
-Claro que soy de aquí, lo que pasa es que me salí de casa y decidí vivir solo, que mejor ¿no?- terminó dando una sonrisa que me hizo quedar boquiabierta con esa mirada que me lanzó


Seguimos platicando en el transcurso del camino, él iba emocionado por tener una amiga que venía de otro país y yo un tanto cansada para querer seguir de excursión, además de mis preocupaciones de buscar donde trabajar para mantener el lugar donde viviría, el dinero que junté más el que me dio mi padre no me alcanzaría ni para un mes de estancia, así que tendría que buscar con urgencia algo en que ocuparme. 

-Bien llegamos ... ¿Te gusta? ¿Verdad que es fantástico? Y espera a que la veas por dentro es genial...- señalaba  aquella casa blanca que lucía acogedora, dos pisos con grandes ventanas y una puerta que lucía tan familiar, grande y blanca como la fachada de esta. Cuando entramos ubique a los lados varias puertas encontrándome justo en medio de un pasillo con un piso reluciente de limpio y mucha luz justo en ese instante habría su puerta la señora encargada de la administración de los cuartos. 

-Hola Eiki al parecer tenemos visitas, ¿quién es? preséntamela....- dijo la Sra muy alegremente 
-Hennie ella es Lana y llegó aquí a un intercambio escolar dime ¿tendrás un cuarto para ella disponible?- en ese momento se acercaba a estrecharme la mano.
-Hola Lana Bienvenida que gusto que te hayas encontrado a Eiki para poder llegar aquí, me imagino que te hubiera sido algo difícil encontrar donde dormir esta noche, aquí puedes sentirte como en casa.- Eiki no dejaba de sonreír esperando ansioso el lugar que me asignarían.
-¡Hola! Sí de hecho eso venía perturbandome todo el camino y parte de mi viaje, pero gracias a Eiki creo que dormiré tranquila esta noche- dije sonriendo.
-Bien pues ¡¡Bienvenida !!!
-¡¡Gracias!!- dije sonriente.

Una vez instalada y con todo arreglado me senté en la cama y me tiré de espalda, sabía perfectamente que no podría esconder por mucho tiempo la razón de mi partida más con el pretexto de que mi madre cayera al borde de la locura. Salí a tomar un poco de aire y a fumar un cigarrillo que bien me hacia falta.
-¿Me invitas uno?- la voz de Eiki se encontraba detrás de mi.
-Claro!.- abrí la cajetilla para que tomara uno, lo prendió y comenzó a hablar.
-Es lindo este lugar, y mas por la gente que vive por aquí- sacó humo de su boca y prosiguió -a unas cuantas calles vive uno de los chicos de TheRasmus ¿los conoces?- mi miró queriendo descifrar mi expresión.
-He escuchado algo de ellos pero eso fue ya tiempo atrás- dije sin dejar de saborear mi cigarrillo.
-Pues pasan seguido por aquí y un poco más allá- señalando el norte - esta su estudio "Dynasty"- siguió fumando.
-Vaya son muy conocidos por aquí?- pregunté.
-Claro niñita tonta- rió -Son muy famosos, aunque por aquí ya estamos acostumbrados a verlos, tendrías suerte de encontrarte al vocal un día de estos.
-Sí claro sería genial- tal vez no me emocionaba tanto como él, pero seguí en la plática.
-Y bien Lane cuéntame de ti ¿cuántos años tienes? ¿Tienes novio? ¿Estas casada?- terminó dando la última fumada al cigarro.
-Oye son demasiadas preguntas en menos de un minuto- reí.
-Tienes razón preguntaré más despacio la próxima vez- sonrió guiñándome un ojo.
-Bueno no tengo novio, no estoy casada y tengo casi los 23 años..- sonreí 
-Demasiado joven para mi...- rió coquetamente.
-¿Qué dices?- Lo miré de frente ya que me había sorprendido su comentario
-Nada Lane yo no dije nada, bueno debo irme te ... Tengo unas cosas pendientes, te veo después- salió casi corriendo no sin antes darme un beso en la mejilla
-Cobarde- dije para mis adentros.


Desperté con un hambre feroz así que salí a ver que encontraba de comer. Camine hasta llegar a un pequeño restaurante donde pude comer. Aunque la comida es muy diferente aquí, no me apetecía nada más que lo que más se allegara al sazón de mamá.

Terminando sali a caminar un poco y por la calles llamo algo mi atenciòn me detuve justo enfrente de una tienda pequeña donde miré un abrigo color gris, largo hasta las rodillas de algodón, así parecía. Cuando termine de admirar tan bello abrigo di media vuelta cuando justo en frente de mi estaba un tipo algo alto de cabellos chinos con ojos verdes, un poco llenito y mirándome a mi ....¿?  
-Debo aceptar que tienes buen gusto en eso de abrigos- dijo sin dejar de ver el aparador.
-¿Te parece? Aunque preferiría dejar de mirarlo he ir a comprarlo...-dije sin dejar de contemplarlo tratando de saber quién era, Su cara era algo familiar ... Yo Lo había visto en algún lugar ... Pero no sabía dónde...
-Se nota que no eres de aquí... Déjame adivinar ...Mmm... ¡¡mexicana !! Sí eso es .... - ahora no dejaba de mirarme.
-Sí exacto ...- me sonroje un poco -Y yo te conozco de algún lugar... Tú cara se me hace conocida .... -dije sin dejar de verlo.
-¡Oh! ¿no me conoces? Es raro ¿sabes? -Rió Nervioso.

- Hey Pauli ¿vienes acá ? ¿O nos alcanzas? - del otro lado grito un tipo delgado y rubio con lentes negros y vestido con una playerita blanca, unas vermudas negras y tenís negros. 
-¡¡Ya voy no se vallan!!!- gritó el tal Pauli en respuesta.
-Amm .... Debo irme pero antes de eso podrías decirme ¡¿cómo te llamas?- dijo en tono casi apurado 
-Lana .... - interrumpiéndome concluyó diciéndome.
-Lana es un gusto conocerte espero verte pronto.... Por cierto tienes unos ojos hermosos.- me dio un beso en la mejilla sin que pudiera decir algo y se fue. 


Llegué a casa y me encontré con la sorpresa de ver a Eiki en la entrada platicando con la Sra Hennie.
-¡¡Lane!! ¡Así que te fuiste de excursión sin mi eh!Te condenaré por esto- rió.
-Sólo fui a comer un poco y a ver que encontraba por ahí .... Todos son tan extraños casi nadie habla con nadie y quién lo hace espera que lo conozca!- dije algo confundida.
-Dime cómo era el tipo que te habló tal vez lo conozca...
-Medía como 1.74cm, de cabello chino, de ojos verdes un poco hundidos....
-Espera, espera ¿me estás diciendo que es de cabellos chinos? ¿Que largo?- preguntó buscando algo en la carpeta que traía en la mano 
-A los hombros yo le cálculo- dije sin preocupación.
-¿Es él?- estiró la mano enseñándome una foto donde estaba él ... 
-Sí ... - dije con los ojos cuadrados por la sorpresa.
-A pues él, es Pauli... Guitarrista de TheRasmus... Fuiste suertuda Lane platicaste con él y tú ni en cuenta- rió más aún después de ver mi cara de asombro.
-oh así le llamaron también...- pensé    

5 comentarios:

  1. Yaiii ese rubio es mi flaco!!! Haha yaiiiiii <3 que felizzzzzz de leer al fin otro fic sigue sigue!

    ResponderEliminar
  2. y deja que llegues al tercer capitulooo awww

    ResponderEliminar
  3. oooopa!!!! que interesante inicio...
    uyyyy como sse ssabrosio con la mirada al tal Eiki ( que por cierto me gustó su nombre)...
    que confianzudo fue LAna al irse con él...bien y era un secuestrador..pero como era guapoooo qu ele hicieran lo que quisiera hahahahahahahahahaha..
    golosa!!!
    ahh aunque tanto..porque mira que estar con Pauli y ni darse cuenta, o de ni inmutarse porque era él..
    hmm esta niña si que no es fan de ellos.o si le gusta uno de ellos?.
    wenoo wenoo creo todo esto girara en torno de Pauli..
    hmm interesante..nunca he leido uno así..hay mucho monopolio LAuristico y Akisistico hehehehehehhehee....
    me gustó bastante....espero aparesca en algun momento el sabroso de Lauri..hehehehehe...

    ResponderEliminar
  4. La mejor historia que he leído, y eso que apenas voy empezando... jajaja \Metalfolk/

    ResponderEliminar
  5. esta perfecto!!, me emocione cuando describias a mi Aki <3 jajaj... seguire leyendo... <3

    ResponderEliminar

No te quedes con las ganas de comentar....