Mi Utopia Parte 4

El amor Crece... y las dudas toman un breve descanso

"La Entrega"

Ubique de lado derecho la mesa que era para exactamente 4 personas allí dejó sus llaves. Y comenzó por presentarme su casa.

El primer cuatro estaba asignado para Su oficina, aunque no tenía aún muebles para que pareciera una, Pero estaba en proceso de serlo Por lo que me dijo él, pasos más adelante estaba la cocina, era pequeña Pero contenía lo necesario, de lado derecho estaba la alacena seguido Por el lavaplatos y la estufa, con un poco de relajo... se notaba que vivía un hombre ahí. De lado izquierdo un par de muebles, en uno estaba el garrafón del agua y en el de alado muchos trastes... 

Al fondo estaba Una pequeña lavadora y junto el lavadero que parecía de juguete... era tan pequeño. Saliendo de la cocina se encontraba el baño, de frente estaba la sala,  los sillones estaban pintados de color vino y en uno de ellos estaba Su guitarra negra, la tomé 
-te gusta?, es mi fiel esposa...-sonrío y la tomo entre sus manos para dejarla en otro sillón, me tomo de las manos no sin antes  darme cuenta que no vivía solo.... tenía Una pecera algo descuidada Pero con unos seres tan hermosos 
-oye deberías tener más cuidado con ellos...- Lo regañe
-oh lo siento! Pero es muy tedioso y el trabajo no me ayuda...-contesto 
-me prometerás hacerlo?- continúe 
-sí Lo prometo- y me robo un beso ... 

Continuamos hasta Su cuarto a donde entramos, me senté en Su cama que era matrimonial bastante cómoda como para quedarme dormida ahí , había Una pequeña ventana y justo ahí estaba un pequeño buró donde guardaba cosas,  muchas cosas .... me ubique en la cabecera y el se sentó en la esquina de la cama, alcance a ver Su closet repleto de trajes aww ... 
-Ann me da tanto gusto que estés Aquí y sepas que está es mi casa...- me dijo después de presentarme casi todos los cuartos 
-por que no me Lo habías dicho?- le pregunte mirándolo con curiosidad 
-por que he pasado por muchas cosas, cuando Una chica se entera que vivo sólo creen que puedo darles asilo o puede prestarse para hacer fiestas y eso no me agrada, Pero tú eres diferente, tú no eres como las demás ellas son materialistas, interesadas y ofrecidas ... tú eres especial, me das el amor que tanto busque...- me sonrojé y continuo 
-no quiero que pienses que te he traído Aquí por otra cosa que no sea presentarte mi casa , quiero que te des cuenta de que soy diferente que no sigo el patrón que demás hombres  buscan en Una mujer ...- se levanto, me extendió la mano para levantarme con él y me beso suavemente tomándome de la cintura y dándome un fuerte abrazo, salimos de cuarto, de frente encontré Una puerta más y me dio curiosidad 
-Aquí que es?- le pregunte mientras seguíamos tomados de la mano 
-Aquí es donde plancho mi ropa y tengo los demás trajes- respondió .
Sí era cierto había otro closet repleto de ellos y un mueblecito con la plancha encima confirmando Lo dicho... y así fue que término mi noche después de Una hora camino a mi casa. 

Volví escaparme de casa... saliendo de trabajar quedamos de vernos... solo avise que llegaría mas tarde de lo normal, me confirmaron con un mensaje que seguía siendo frio como la actitud de casa hacia mí.

Lex me sorprendió llevaba un pantalón beige con Una camisa negra y sandalias demasiado casual... tomamos rumbo a no sé donde ... desconocía por donde él vivía ... Pero algo que no se me olvidaba era el lugar donde comimos las hamburguesas tan famosas conocidas en cualquier lugar, justo después fuimos al cine que se encontraba en la misma plaza... 

De camino a su casa no dejaba de repetirme lo bien que la había pasado, la película fue interesante, Pero la hacía más interesante cuando buscaba la forma de Besarlo y lo lograba... cada beso que le daba era muy intenso reflejaba el amor que sentíamos en todo momento, el sentir sus labios ya era una  adicción para mi... suaves apasionados y deleitándonos de las pocas personas que se encontraban allí . 
Llegamos a su casa y antes de entrar al edificio salió Una niña al parecer de 12 años lucía lo bastante pequeña para mirarme con Una cara de odio y celos, solo le sonrió a Lex.
-No la tomes en cuenta, siempre a sido así- comentó 
Llegamos a su departamento  y nos dirigimos a la cocina donde bebí agua hasta saciar mi sed. Noté que había limpiado un poco, justo antes de mirar más adelante me tomo de las manos besándome y nos dirigimos a su recámara dejándonos caer en la cama, sintiendo su peso sobre mi 
-no sabes cuánto te quiero Ann, me has cambiado la vida- apenas lo decía susurrándome al oído sin dejar de acariciarme la cabeza, yo lo aparte quitándole de encima de mí y cambiando de posición
-yo también te quiero más de lo que imaginas- y me recosté en Su pecho. 

La luz del día entraba por la ventana el sol poco a poco apagada su luz, nos encontramos abrazados uno del lado del otro... miramos el reloj, ya era hora de irnos. 
El camino a casa era largo Pero ya estábamos haciendo planes para salir el fin de semana siguiente ... 

Los días seguían pasando tan rápido que no notaba cuan era el amor que ya estaba sintiendo por el ... los problemas con Eric seguían igual y cada día me notaba más distante de él, dejamos de platicar, estaba completamente fría en actitud, mi familia no estaba muy contenta Pero trataba de asimilar Lo que sentía ... Una de las pocas veces que platicaba con mi hermana, trato de decirme algo Pero sólo pregunto 
-y tú novio?- me quedé helada al oír eso Pero sonreí ocultando la verdad 
-no es mi novio y supongo que está trabajando no lo he visto- me miro extrañada Pero siguió con Su plática cambiando de tema.
Iban a dar las 10 de la noche y llegó un mensaje de Alexander 
-Ann que te parece sí nos vemos hoy escápate está noche conmigo… si? - madre mía, ¿qué iba a decir en mi casa? 
-me acaban de invitar a Una fiesta puedo ir?- pregunte ocultando a donde me dirigía está noche. 
-sí... a qué hora llegas?- sí ? Demasiado rápido para Una contestación.
-no se te aviso...- contesté 
-ok sí no llegas me avisas- eso no era normal en mi hermana creo que se estaba auto medicando... me estaba preocupando
-sí está bien- concluí. 

Llegó por mí a las 12 00 am en punto... en Lo que llegábamos a su casa me cuestionaba como conseguí salir sin ningún problema le dije Lo que pasó y quedo igual que yo. Era de sorprenderse jamás había conseguido un permiso así.
-Estas consciente de que te quedarás conmigo hoy verdad Ann??- me miro esperando mi respuesta y la reacción que haría 
-Sí lo sé, no he dicho a qué hora llegaría- contesté Lo más tranquila posible, el volteaba a verme para encontrar alguna otra cosa en mi respuesta, Pero ocultaba los nervios que sentía....
Me estaba haciendo demasiadas ideas en mi cabeza. 

Una vez en casa nos sentamos en el sillón, que había cambiado de posición a la entrada y el comedor justo enfrente de la cocina, se sentó a mi lado, recargo sus labios en mi frente y abrazándome comenzó a besarme hasta llegar a mi boca. Charlamos poco, la calma se sentía en casa y estábamos completamente en paz sin ruido, sin nadie, solo nosotros dos… La ternura de sus besos me llevaban al cielo…... o más bien a su recamara.

 Sentí que estaba sobre mi rozándome el cuello con su nariz y sus labios, tocando cuidadosamente mi piel sobre la ropa puesta. Recargo su cabeza en Una mano y con la otra bajaba el índice sobre mis cejas a mi barbilla, después busco mi mano y la entrelazo con la suya volviéndome a besar lentamente, me quité los zapatos y reacomodándome en la cama me senté, Lex se inclino hacia mi abrazándome tan fuertemente y sacando el suéter que cubría mi cuerpo comenzó a tocar mis brazos llevándolos a su cuello, volvió a recostarse llevándome con él, su camisa comenzaba a estorbarnos y la desabroche poco a poco hasta terminar con el último botón y haciendo que cambiara de posición se la quité y la aventé. Roce sus brazos y me volví a ellos para sentirlos más aún, comencé desde los hombros bajando poco a poco mis manos, recargue mi cabeza en su pecho aún con playera, retrocedí hasta la pared y el siguió mi movimiento como si hubiéramos conectado un imán entre los dos, quito la blusa que traía dando un beso en cada hombro y quedándome con Una playerita mas mi sostén .... 
Nos detuvimos por un momento y me llevó a sus brazos otra vez haciendo sentir su calor, recostándonos Una vez más, me ubique de costado y el atrás de mi me abrazo... caía de sueño pero el vibrar de mi cuerpo junto al suyo me hacia permanecer despierta.  
Comenzó a tatuarme un beso sobre la espalda, me voltee lentamente y mordió mi oreja hasta hacerme gritar de la satisfacción, desabrocho el botón de mi pantalón, siguiéndole Lo hice con el suyo hasta que quedamos sólo en ropa interior, no sé en que momento había quitado mi playera de tirantes pero ya estaba en el suelo, comencé a darle la espalda y rápidamente desabrocho mi sostén, opté por tomar la cobija más cercana y me tape. 
-No te tapes...- reí nerviosa estaba sonrojada y me miraba con ternura 
Quito poco a poco la cobija que me tapaba y ahora estaba oficialmente en calzones, alcance a taparme mis pechos y comenzó a besarme los brazos se acerco a mi oído y suspirando me dijo 
-me encantas- Lo abrazé tan fuertemente sintiendo su pecho sobre el mío, teniendo el contacto de mis manos en su espalda que bajaban lentamente explorando la suavidad de cada parte de ella...

-te quiero Lex te quiero- susurre

 Comencé a sentir como presionaba mis hombros y subía las manos a mi cabeza, besándome con Una vivacidad embelesando cada sentimiento que estaba haciéndonos flotar.

Nos quedamos quietos, volviendo a ponerme de costado, su cuerpo detrás del mío le daba Una temperatura cálida, sus manos estaban puestas en mi vientre y no paraba de besarme la espalda, se detuvo y abri los ojos

-Sabes que me siento tan afortunado de estar contigo?- me gire poco a poco para tenerlo de frente

- no, no lo sabía…- y le di un beso en la boca.

Dormimos cerca de 2 horas, tenía que irme a dejar temprano y nos levantamos a las 5:30 am nos vestimos rápidamente no sin antes darnos nuestra dosis de besos, fui al baño donde me siguió y parado en la puerta me contemplaba tiernamente, mirando cómo me arreglaba el cabello, salimos corriendo de su casa.

Al menos en casa no se molestaron, no me preguntaron nada y pude dormir un rato mas… Lex tenía que regresar a bañarse y después a trabajar.

Aunque sabía que no había pasado a mas no podía dejar de pensar que si hubiese llegado a fusionarse nuestro amor que sería de mi… Mi piel tenía su aroma y recordaba la sensación de sentirlo piel a piel, tal vez si hubiésemos querido hacerlo lo hubiéramos hecho… pero no, solo hicimos el amor.

Eso era el amor.

Los días en que llegaba a visitarle en el trabajo ya era de costumbre encerrarnos en la oficina, era más intenso lo que guardábamos tras esa puerta, había veces en que nos tirábamos en el piso besándonos como en cualquier lugar, salíamos tarde de ahí porque jamás veíamos el reloj hasta que nos deteníamos y volteábamos a verlo, en ese momento casi salíamos huyendo, él temía por que me regañaran…

Llegue más temprano de costumbre y el ya me esperaba en la puerta, algo tenia y me estaba preocupando,

Todo estaba en calma, ya casi no había nadie.

Una vez ya sentada le pregunte

-Que tienes lex?- dije sin dejar de mirarle la seriedad que tenia

-No es nada Ann, he estado pensando que tal vez yo no sea la persona indicada para ti, no quiero hacerte daño… te quiero demasiado.- la expresión de su cara no era normal yo comencé a tener miedo

-Pero porque dices eso Lex? A caso no quieres estar conmigo?- pregunte tomándole la mano sobre el escritorio.

-Crees que no te quiero? Crees que no me siento bien contigo? Te quiero mas de lo que imaginas..  es solo que me da miedo hacerte daño… no me lo perdonaría jamás- tenía una expresión triste creo que estaba … terminando?

Se puso de pie y me levanto con el… puso sus manos sobre mis mejillas

-Lex yo te quiero… porque lo dices? Acaso no…- me beso sin dejarme terminar

-Quiero lo mejor para ti Ann, me dolería mucho dejarte, eres parte de mi, eres mi todo..- estaba a punto de llorar y el no dejaba de tener esa expresión triste.

-No Lex, no lo hagas… Te Necesito!- lo abrace presionándolo a mi cuerpo mientras él me besaba la cabeza.

-No lo hare no ahora … no aun…- tenía su cabeza sobre la mía, yo sollozaba y temía por quedarme sin el

-Dejemos que siga si?- dije separándome de el y mirándolo fijamente

-Lo que dure Ann…?- pregunto

-Si..- sabia que me adoraba tanto como yo a él, tal vez podría extender esto más de lo que esperaba… un poco mas…

-Te quiero Anny… Gracias! Gracias!- concluyo

Una de las cosas que más me daba pavor era perderlo… Sabía que él era esa persona que tanto busque, lo quería demasiado y no me concebía sin él a mi lado.

El taxista me llevo rápidamente y el ya me esperaba para irnos… habíamos quedado en que lo haríamos… terminaríamos lo que comenzamos en su casa, yo me encontraba lo suficientemente nerviosa para pensar en algo más que en lo que sucedería… La decisión fue de los dos después de dos semanas de pensarlo hasta que dijimos que si… ya que el fin de semana no estaría aquí.

Llegamos al lugar, bastante silencioso diría yo, sentía que se me caían los calzones, me temblaban las piernas… tenía un nudo en la garganta, en el estomago, en los pies, podría jurar que si no fuera porque iba agarrada de el de su brazo me hubiera caído…

Entramos a la habitación, y deje mis cosas en el tocador y me senté en la cama mirándolo caminar hacia a mi…

-estás segura Ann?- me pregunto inclinándose para mirarme los ojos

-… si…- conteste

Me levante, lo tome de la cara y lo bese, el tomándome de la cintura me alzo quedando libre su cuerpo para amarrarlo con mis piernas, nos dejamos caer en la cama, comenzamos a quitarnos la ropa lentamente llenado de besos cada lugar que íbamos destapando la piel.

La cama estaba llena de ropa y yo me encontraba semidesnuda, el repetir esa sensación de sentir su piel junto a la mía me volvía loca… tuvo cuidado de cada movimiento que hacia… beso mi vientre hasta llegar a mi boca, despeinaba mi cabello con sus manos mientras yo bajaba las mías por su espalda y regresando por su pecho… Me envolví en su aroma lentamente, conociendo a detalle su piel y él la mía… sentada sobre él bajo sus manos sobre mi espalda y presiono lentamente mi cintura, me abrazo y me cargo para llevarme nuevamente a la cama donde ya nada impedía ser uno mismo…

Lleno de besos mi boca, tomo una de mis manos y susurro

-Te amo- sellando los míos para que no dijera una sola palabra y quedara grabado el amor que sentía por mí.

No nos fue bien con respecto al resultado que queríamos obtener, mi nerviosismo no dejo llevarnos mas allá de estar nuevamente desnudos en la cama…

-Que te paso Ann?- pregunto ya de camino a mi casa

-No se… me puse demasiado nerviosa- respondí agachando la cabeza

-No te preocupes… se que puede ser difícil y lo intentaremos cuando tu estés lista ok?- sonrió dándome la mano, haciendo sentirme segura…

Antes de llegar a casa iba recordando el instante en que le dije –no puedo- creí que se molestaría pero no fue así…

La rutina de besos no se detuvo pero aun así no logramos concretar nada, no podía dejar de sentirme culpable, mis nervios me traicionaron y me paralizaron todo el cuerpo.

Cuando nos levantamos y nos vestimos me abrazo tan fuertemente y yo a él, terminamos de arreglarnos aunque no dejo de contemplarme todo el tiempo, yo al espejo junto a él… lucíamos algo arrugados, pero tan bien… limpie mi ojos ya que el rímel se había corrido un poco, jamás me había sentido tan desarreglada… Fue cuando mi pensamiento termino y llegamos a casa…

-Bien Princesa hemos llegado-

-Gracias príncipe! Me haces la mujer más feliz del mundo-

-Tú eres la que me hace sentir el hombre más afortunado te adoro tanto…- termino y me abrazo no sin antes decirme lo que me esperaba, del dichoso viaje de trabajo –Recuerda que no nos veremos este fin de semana así que me extrañas y no dejes de pensar en mi… en cuanto llegue te marco si Cariño?- me dio un beso y baje del auto diciéndole adiós y termine exhausta y triste porque ya comenzaba a extrañarlo.

Mi fin de semana no fue muy bueno… no recibí mensaje de él ni el domingo cuando se supone que debería de haber llamado, lo hizo el lunes …. Estaba al borde de la histeria

-Me tenias muy preocupada eh!- le reclame en el instante en que sonó mi celular

-Si lo sé, lo siento- el tono en que lo dijo era muy raro, frio, distante… seco

-Lex que tienes?- comencé a dudar de lo que tenia … le habrá pasado algo? Estará enojado conmigo?

-Ann tenemos que hablar….- esa palabra me daba miedo después de colgar comencé a llorar.